jueves, 16 de julio de 2020

TIPOLOGÍA DEL SERVICIO

Por Joaquín E. Mendoza Alfaro
Director de C3: Consultoría y Capacitación en Calidad del Servicio


Hay diferentes formas de clasificar los servicios. A continuación te presentamos algunas de las más conocidas (Monterroso, 2009).

1. Individuales y colectivos. Se refieren al nùmero de personas que pueden ser atendidas, por ejemplo cortarse el pelo (servicio individualizado) o un restaurante, en donde se pueden atender a muchas personas al mismo tiempo (colectivos).


2. Estandarizados / personalizados. Los servicios se pueden prestar “a la medida” como un sastre, o servicios estandarizados, diseñados para servir a muchas personas, por ejemplo, a través de internet.

3. Mano de obra intensiva / de capital intensivo. Se refieren a la proporción en la utilización de mano de obra respecto a la necesidad de capital. Los servicios profesionales son de mano de obra intensiva, por ejemplo, recolección de residuos, seguros, educación. Los servicios de seguridad con circuito cerrado, cajeros automáticos, generación y distribución de energía pueden considerarse de capital intensivo.

4. Sobre las personas / propiedades de las personas. Los servicios se prestan directamente sobre la persona (por ejemplo, en una estética) o sobre alguna de sus posesiones (taller automotríz)

5. Con resultados tangibles/intangibles. Como su nombre lo indica, el resultado del proceso de servicio puede o no visualizarse, por ejemplo, servicio de reparación de calzado vs. terapia psicológica.

6. Efectos perdurables /discretos en el tiempo. , como servicios financieros como una pensión o servicios exclusivos como socio permanente de algún club, entre otros.

7. De demanda estable/ fluctuante. En general, siempre se está en presencia de variabilidad o fluctuaciones en la demanda, pero hay algunos tipos de servicios que son más estables a lo largo del tiempo (como las inscripciones en una escuela) o que presentan menor estacionalidad, variabilidad mensual, diaria ú horaria (como en un restaurante).

8. Con alta / baja participación del cliente. Hay servicios en donde el cliente es co-productor, esto es, está a cargo de algunas operaciones necesarias para la prestación del mismo; en estos casos se dice que el cliente tiene alta o media participación. Respecto a la participación, también habría que diferenciar si ésta es una participación pasiva o activa. El servicio de peluquería es un servicio de participación pasiva, mientras que un autoservicio es de participación activa. Ambos son de alta participación.

9.  Servicios con alta/ baja interacción cliente – personal de servicio. Independientemente del grado de participación, podemos hablar de servicios de alta interacción cuando el cliente establece una alta interrelación ó intercambio con el personal del servicio, ya sea por trato verbal (por ejemplo, telemarketing) o contacto físico (como  una esteticista) o de baja interacción (por ejemplo, en un establecimiento de comida rápida).

10. De alto / bajo contacto con el cliente. El contacto con el cliente se define como el porcentaje de tiempo que el cliente está presente mientras se presta el servicio. Se refiere al cliente en contacto con el sistema de servicios, independientemente que participe o no en la prestación del servicio e independientemente que tenga alta o baja interacción con el personal del servicios

Así, el servicios de correo es ejemplo de sistemas de bajo contacto, mientras que la utilización de un cajero automático y un servicios de hotelería constituyen ejemplos de sistemas de servicios de alto contacto.

11. Internos/externos. El servicio interno es el servicio prestado por personal de una organización a la organización misma: a los directivos, empleados, instalaciones o bienes de dicha organización (servicios de pago de nómina, servicios de mantenimiento, etc.). El servicio externo es aquel que se ofrece  a  clientes externos a la organización (clientes finales, individuales o colectivos, empresas ú otro tipo de organizaciones).

12. Sustantivos/operativos. El servicios principal o sustantivo hace referencia a los servicios vitales que se ofrecen al consumidor; los servicios accesorios u operativos son servicios complementarios para el mismo mercado objetivo, por ejemplo, la entrega de medicina a domicilio, una universidad con instalaciones deportivas.

13. Explícitos/ implícitos. Los primeros se relacionan con la oferta intrínseca, concreta, de servicios, mientras que los servicios implícitos se refieren a los beneficios psicológicos, intangibles, resultantes de experimentar el servicio (relacionados con el placer, la seguridad, el sentido de pertenencia, el status, la tranquilidad, etc.) Por ejemplo, podemos comprar un reloj para poder consultar la hora, pero si elegimos alguno de una marca exclusiva, uno de los beneficios implícitos sería la imagen, el status o la diferenciación que nos puede otorgar dicha marca. Podemos asistir a un bar a tomar café, pero los beneficios de comodidad, relax o intimidad que experimentemos podrían ser los beneficios implícitos que podríamos buscar.

 

Referencias

·       Monterroso, E. (2009) Tipología del Servicio. http://www.unlu.edu.ar/~ope20156/pdf/servicios.pdf. Consultado el 16 de julio de 2020.

 


miércoles, 8 de julio de 2020

LA SATISFACCIÓN DEL CLIENTE

Por Joaquín E. Mendoza Alfaro
Director de C3: Consultoría y Capacitación en Calidad del Servicio

A mediados de los sesentas del siglo pasado, los Rolling Stones cantaban "I can´t get no satisfaction", un himno de la generación de esos años y una de las mejores canciones de la historia del rock. 


Han pasado ya 55 años y, desafortunadamente, una inmensa cantidad de consumidores seguramente podrían estar cantando lo mismo porque sus necesidades de servicio no son satisfechas a plenitud o con consistencia. ¡El servicio de calidad es un bien escaso!

Puesto que el cliente es el centro del negocio y como requerimos de su patronazgo, se vuelve indispensable que nos enfoquemos en la satisfacción del cliente. Pero ¿qué es la satisfacción del cliente? De  acuerdo a Oliver (1997, pp.13):

“Satisfacción es la respuesta de realización del consumidor. Es un juicio de que una característica de un producto o servicio, o el producto o el servicio en sí, proporciona un nivel placentero de realización relacionada con el consumo”.

Con base en esta misma definición, Zeithaml, Bitner y Gremler (2009, p.104) dan su propia interpretación:

“interpretamos que esta definición significa que la satisfacción en la evaluación del cliente de un producto o servicio en función de ese producto o servicio ha cumplido las necesidades y expectativas del cliente”

Además, esta interpretación es muy parecida con la definición de ISO 9000 (2015):

3.9.2 Percepción del cliente sobre el grado en que se han cumplido las expectativas de los clientes”.

Como se puede ver, estas definiciones están interrelacionadas a partir de las expectativas y nos permiten mejorar el entendimiento de la satisfacción. 

Lograr clientes satisfechos genera grandes beneficios (Hoffman y Batteson, 2011):

                  Aísla a los Clientes de la competencia

                  Fomenta Clientes Repetitivos

                  Estimula y promueve los comentarios positivos

                  Los Clientes satisfechos compran más y/o con mayor frecuencia

                  Disminuye los costos de atraer nuevos Clientes

                  Aísla la presión de los precios; Clientes dispuestos a pagar más.

                  Mejor selección de personal

                  Crea una ventaja sostenible

Es por todas estas razones que el objetivo de todas las organizaciones para con el cliente debería ser alcanzar su satisfacción en forma plena y consistente.

Referencias

      ISO 9000: 2015. Sistemas de gestión de la calidad — Fundamentos y vocabularioNorma Internacional, Traducción oficial. Ginebra: International Organization for Standardization.  

   Hoffman, K, D. y Batteson, J.E.G. (2011)  Fundamentos de Marketing de Servicios: Conceptos estrategias y casos.  México: Thompson Editores.

Oliver, R.L. (1997)  Satisfaction: A behavioral perspective on the consumer. New York: McGraw Hill.

    Zeithalm, V., Bitner,M.J. y Gremler, D.D. (2009). Marketing de Servicios. México: McGraw-Hill.